Aquellos que no creen que los valores morales deben venir de la Biblia o que su base sea la enseñanza moral de Dios, argumentan que tienen una mejor fuente de valores: la razón humana.
En realidad, la era que comienza el asalto del Occidente moderno contra los valores judeocristianos se conoce como “La Edad de la Razón”. Esta edad nos trajo la moderna era laica, una etapa en la que los artífices de la Ilustración soñaron con ser liberados de los grilletes supersticiosos de la fe religiosa y depender sólo de la razón. Sin Dios y sin Biblia la razón los guiaría a una época de grandeza moral sin precedentes.
Y lo que vino fue una era que vio el declive de la religión en Europa y que no llevó a la época de grandeza moral sin precedentes, sino a crueldad sin precedentes, superstición, asesinatos en masa y genocidio. Pero los creyentes de la razón sin Dios se quedaron impertérritos. Los laicos han ignorado la vasta evidencia que muestra que el mal en gran escala es lo que sigue al declive de la religión judeocristiana.
Hay 4 problemas básicos con la razón divorciada de Dios como guía de la moralidad.
El primero es que la razón es amoral. La razón es sólo una herramienta, por consiguiente, puede fácilmente usarse para argumentar a favor del mal o del bien. Si Ud. quiere lograr el bien, la razón es inmensamente útil; si quiere hacer el mal, la razón es inmensamente útil. Pero la razón por sí misma no puede determinar a cuál escoger. A veces es racional hacer lo que está mal y a veces es racional hacer lo que está bien.
Es un disparate afirmar que la razón siempre nos indica el bien. La Madre Teresa dedicó su vida a alimentar y vestir a los moribundos de Calcuta. ¿Fue tomada esta decisión basándose en la razón? Para defender que fue basada sólo en la razón tendríamos que decir que cada persona cuyas obras son guiadas por la razón llegaría al mismo nivel de altruismo y que cualquiera que no viva como la Madre Teresa está actuando irracionalmente.
Esos europeos no judíos que arriesgaron sus vidas para salvar a un judío durante el Holocausto ¿actuaron basándose en los dictados de la razón? En toda una vida dedicada al estudio de los motivos de esos salvadores, jamás me he cruzado con un solo caso de alguna persona que haya salvado judíos por la razón. En realidad, era contrario a la razón para cualquier no judío arriesgar la vida para salvar judíos.
Otro ejemplo de la incapacidad de la razón para llevarnos a conclusiones morales: Virtualmente en cada pregunta controvertida sobre la moral, no existe algo como un puramente racional punto de vista (ausente). ¿Cuál es el puramente racional punto de vista de la moralidad del aborto, o de la desnudez pública, o del valor de un animal versus la vida humana, o de la guerra en Irak, o de la pena de muerte por asesinato? En cualquiera de estos temas, la razón por sí misma puede defender con efectividad cualquier posición. Por lo tanto, lo que determina las opiniones morales de cualquier persona, entre otras cosas, son sus valores y valores que van más allá de solamente la razón. (Aunque debemos poder explicar y defender esos valores con racionalidad). Si Ud. valora el feto humano, la mayoría de abortos son inmorales; si Ud. sólo valora el punto de vista de la mujer sobre el valor del feto, todos los abortos son morales.
El segundo problema con la razón como única guía moral es que no somos capaces de funcionar moralmente sólo con la razón como base. Nuestras pasiones, psicología, valores, creencias, emociones y experiencias influyen todas en la manera que hasta el ser más racional determina lo que es moral y si debe hacerlo.
Tercero, el creer sólo en la razón está basado en la irracional premisa de que la gente es básicamente buena. Ud. tiene que creer que la gente es básicamente buena para poder creer que la razón humana llevará necesariamente a conclusiones morales.
Cuarto, aún cuando la razón lleve a una conclusión moral, ésta no obliga a seguirla de manera alguna. Regresemos al ejemplo del no judío en la Europa ocupada por los nazis. Imaginemos que una familia judía llama a la puerta, pidiendo ser escondidos. Imaginemos más allá, que basándose solamente en fundamentos racionales (aunque no puedo imaginar ninguno) el no judío decide que lo moral es esconder a los judíos. ¿Tomará esta decisión arriesgando su vida? Nunca si sólo lo guía la razón. La gente no arriesga la vida por extraños basándose en la razón. Lo hacen por fe, fe en algo que trasciende más allá que sólo la razón.
¿Todo esto significa que la razón es inservible? ¡Dios no lo quiera! La razón y el pensamiento racional están entre los hitos de la grandeza potencial de la humanidad. Pero por sí sola, la razón no tiene mayor valor en la búsqueda más grande de todas: lograr seres humanos más bondadosos y más decentes. Para lograr eso necesitamos a Dios, un manual divinamente revelado y la razón, todo eso es necesario. Y aun así, no hay garantías de lograrlo.
Pero si quiere una evaluación rápida de adónde nos lleva la razón sin Dios, vaya directo donde la irracionalidad y la confusión moral está infiltrada de razón sin Dios: visite la universidad de su localidad.
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